Una leyenda argentina

En lo profundo de los valles andinos de Argentina, vivía el legendario Coquena, un ser misterioso que siempre estaba acompañado por su inseparable cabra.

El Coquena era conocido por su amor por la naturaleza y su capacidad para comunicarse con todos los animales. Pasaba sus días cuidando de los árboles, las plantas y los animales, y enseñando a los niños del lugar a respetar y amar a la tierra.

- Un día, una sequía azotó la región, dejando a todos los habitantes sin agua ni alimentos. Los lugareños estaban desesperados, y decidieron buscar al Coquena en las montañas para pedirle ayuda. Al encontrarlo, le pidieron que intercediera por ellos y trajera la lluvia de regreso a sus tierras.

El Coquena, conmovido por la situación, decidió ayudar. - Le pidió a su cabra que lo ayudara a tocar su flauta mágica, la cual tenía el poder de llamar a la lluvia.

Al compás de la melodía, las nubes comenzaron a juntarse en el cielo, y pronto una suave lluvia comenzó a caer sobre el valle. Los habitantes, maravillados, celebraron la llegada de la lluvia y agradecieron al Coquena por su generosidad.

Desde ese día, el Coquena se convirtió en un símbolo de amor por la naturaleza y la importancia de cuidar el medio ambiente. Los niños del lugar aprendieron la lección del Coquena y se comprometieron a ser guardianes de la tierra.

- Aunque el Coquena y su cabra volvieron a la soledad de las montañas, su legado perdura en la región, recordándoles a todos la importancia de cuidar y respetar el entorno natural.