Unidos somos más
Había una vez un grupo de letras muy especial: las vocales. A, E, I, O y U vivían juntas en el abecedario y eran inseparables. Siempre estaban dispuestas a formar palabras y ayudar a los demás.
Un día, mientras jugaban en el parque de las letras, se encontraron con una letra solitaria llamada X. Las vocales se acercaron curiosas y le preguntaron qué hacía allí sin ninguna palabra para acompañarlo.
X les contó que había pasado mucho tiempo buscando su lugar en el abecedario, pero nadie quería jugar con él porque era diferente. Las vocales sintieron pena por X y decidieron ayudarlo.
A sugerencia de A, las vocales propusieron hacer un juego para demostrarle a X que todos podían trabajar juntos sin importar sus diferencias. Decidieron organizar una competencia de palabras donde cada vocal debía formar la mayor cantidad posible. El primer turno fue para A, quien rápidamente formó —"amor" .
Luego siguió E con —"elefante" , seguida por I con —"iglesia" y O con —"oso" . Cuando llegó el turno de U, todos esperaban ansiosos por ver qué palabra lograría formar. U pensó durante un momento y sorprendió a todos al decir: "-¡Auxilio!".
Las vocales quedaron desconcertadas ante esta respuesta inesperada. Pero pronto entendieron lo que U quería decirles: necesitaba ayuda para poder encontrar una palabra.
Juntas comenzaron a pensar en diferentes opciones hasta que finalmente se les ocurrió algo genial: podrían combinar todas sus letras para formar la palabra "unión". Así fue como todas las vocales se unieron para ayudar a U. X estaba maravillado al ver cómo las vocales trabajaban juntas y formaban palabras hermosas.
Desde ese momento, X se sintió parte del grupo y nunca más se sintió solo. Las vocales aprendieron una valiosa lección: no importa cuán diferentes sean, siempre pueden trabajar juntas y encontrar soluciones.
A partir de ese día, el abecedario estuvo completo con la presencia de X y todos vivieron felices formando palabras en armonía. Y así, las vocales demostraron que la amistad y la colaboración son fundamentales para superar cualquier obstáculo.
Desde entonces, siempre estuvieron dispuestas a ayudarse mutuamente y a aceptar a aquellos que eran diferentes. La historia de Las Vocales nos enseña que la diversidad es algo hermoso y que todos tenemos algo especial para ofrecer. Aprendamos de ellas y recordemos que juntos podemos lograr cosas maravillosas.
FIN.