Vacaciones en el Hotel Acuático
Era un caluroso día de verano y un grupo de amigos, Tomás, Valentina, Lucas y Sofía, estaban emocionados porque iban a pasar una semana en el Hotel Acuático, conocido por su enorme piscina y divertidos juegos.
**Día 1: La llegada al hotel**
Los niños llegaron al hotel y al ver la piscina, gritaron de alegría.
"¡Miren esa piscina, es gigante!" - exclamó Lucas, saltando de emoción.
"No puedo esperar para zambullirme!" - dijo Valentina.
Tan pronto como dejaron sus cosas en las habitaciones, se cambiaron y corrieron hacia el agua.
**Día 2: El primer concurso de natación**
Esa mañana, el hotel organizó un concurso de natación.
"Yo voy a ganar, soy el mejor nadador aquí!" - se jactó Tomás.
"¡Yo quiero participar también!" - inocentemente dijo Sofía.
El concurso comenzó y todos nadaron lo mejor que pudieron. Sofía, con su técnica de nado que había aprendido en clases, sorprendió a todos al llegar en tercer lugar.
"¡Lo logré!" - exclamó feliz mientras sus amigos la aplaudían.
"¡Sos una campeona, Sofi!" - dijo Valentina.
**Día 3: La tormenta imprevista**
El tercer día, mientras jugaban al borde de la piscina, el cielo se oscureció repentinamente.
"¿Qué es eso?" - preguntó Lucas, apuntando al horizonte.
"Parece que se viene una tormenta..." - respondió Tomás, preocupado.
Los niños se asustaron un poco, pero decidieron buscar refugio en el lobby del hotel para jugar a las cartas.
"No dejemos que la tormenta arruine nuestras vacaciones," - dijo Valentina, tratando de animar a todos.
"¡Sí! Podemos inventar un nuevo juego aquí!" - sugirió Sofía.
Así que comenzaron a jugar “el ahorcado” mientras escuchaban el sonido de la lluvia sobre el techo.
**Día 4: La aventura del cuarto escondido**
Al día siguiente la tormenta se había ido, y los niños decidieron explorar el hotel.
"¿Y si encontramos el cuarto escondido que me contaron?" - preguntó Lucas intrigado.
"¿Cuarto escondido? No suena bien..." - dijo Tomás, algo asustado.
A pesar del temor, decidieron buscarlo. Después de un rato, encontraron una puerta oculta detrás de un arbusto. Cuando la abrieron, descubrieron un hermoso jardín lleno de flores y mariposas.
"¡Guau! Esto es increíble!" - exclamó Sofía.
"¡Miren esas mariposas! Son hermosas!" - dijo Valentina.
Pasaron la tarde jugando y disfrutando del lugar.
**Día 5: El gran chapuzón**
El último día del hotel, los niños decidieron hacer el ‘Gran Chapuzón’, una competencia amistosa.
"Vamos a hacer el mejor salto de la piscina!" - animó Tomás.
Cada uno fue tomando turnos, y al final, todos se lanzaron a la piscina juntos.
"¡3, 2, 1, ¡salto!" - gritaron a coro.
Cayeron al agua haciendo una gran explosión de burbujas.
"¡FUE ÉPICO!" - chilló Lucas mientras emergía del agua.
"Quiero que esto nunca termine!" - dijo Valentina, sonriendo.
**Día 6: La despedida**
El último día llegó rápidamente, y había que empacar.
"No quiero volver a casa..." - dijo Sofía con tristeza.
"Pero tenemos que volver a contarles a nuestras familias lo divertido que fue!" - dijo Tomás.
Se despidieron del hotel y prometieron volver el próximo año.
"¿Hacemos un pacto? Cada año volvemos aquí!" - sugirió Valentina.
"¡Hecho!" - dijeron todos.
Y así, con los corazones llenos de alegría y recuerdos, los niños regresaron a casa, sabiendo que la amistad y las aventuras son lo más importante.
**Fin de la historia**
FIN.