Valentina y el poder de la amistad
En la escuela "Rayitos de Sol" todos los niños jugaban y se divertían juntos, excepto por Daniel y Jorge, dos chicos que siempre buscaban problemas.
Les encantaba molestar a los demás, hacer bromas pesadas y reírse de quienes eran más pequeños o diferentes. Un día, mientras jugaban en el patio del colegio, Daniel y Jorge decidieron esconderle la mochila a Martín, un niño muy tranquilo y estudioso.
Martín comenzó a buscar desesperadamente su mochila entre las risas de los dos traviesos. "¡Ja ja ja! ¿Qué pasa, Martín? ¿Perdiste algo?", se burlaba Daniel. Martín no sabía qué hacer. Se sentía triste y frustrado por el maltrato constante de Daniel y Jorge.
Pero justo en ese momento apareció Valentina, una niña valiente y solidaria que no soportaba ver injusticias. "¡Hey! ¡Dejen en paz a Martín! No es gracioso burlarse de los demás", exclamó Valentina con determinación. Daniel y Jorge se quedaron sorprendidos por la valentía de Valentina.
Nunca antes alguien les había plantado cara de esa manera. A partir de ese momento, Valentina decidió hacerles frente a los dos molestosos chicos para proteger a sus compañeros.
Poco a poco, otros niños se unieron al coraje de Valentina. Juntos formaron un equipo para detener las travesuras de Daniel y Jorge e inculcarles valores como el respeto, la empatía y la amistad.
Una tarde, durante el recreo, Daniel intentó quitarle el almuerzo a Sofía sin que nadie lo viera. Sin embargo, esta vez fue diferente: todo el grupo liderado por Valentina estaba atento a sus movimientos. "¡Alto ahí! ¡Ya es suficiente! No permitiremos más bullying en nuestra escuela!", gritó Valentina con firmeza.
Daniel se sintió acorralado por primera vez. Miró a su alrededor y vio cómo todos lo observaban con decepción en sus ojos. Fue entonces cuando comprendió que sus acciones estaban lastimando a otros niños y que debía cambiar su actitud.
Jorge también reflexionó sobre sus comportamientos dañinos gracias al ejemplo positivo de Valentia y al apoyo del resto del grupo escolar. Juntos decidieron disculparse con Martín, Sofía y todos aquellos a quienes habían lastimado en el pasado.
Desde ese día, Daniel y Jorge dejaron atrás su actitud negativa para convertirse en amigos solidarios e inclusivos. Aprendieron que ser amables era mucho más gratificante que causar dolor a los demás.
La escuela "Rayitos de Sol" se convirtió en un lugar donde reinaba
FIN.