Valientes Niños de Fe

Había una vez un hermoso día en el que Jesús decidió pasar tiempo con unos niños para enseñarles cosas maravillosas. Se sentaron juntos bajo la sombra de un árbol y Jesús sacó su biblia.

"¡Hola, chicos! Hoy vamos a leer una historia muy especial de la biblia", dijo Jesús emocionado. Los niños se acomodaron alrededor de él, ansiosos por escuchar lo que tenía para contarles. Jesús abrió la biblia y comenzó a leer sobre un hombre llamado David.

Les contó cómo David era un joven pastor que cuidaba ovejas en el campo y cómo Dios lo eligió para ser rey de Israel.

"David no era muy grande ni fuerte, pero tenía algo muy especial: ¡un corazón lleno de valentía y fe!" explicó Jesús mientras señalaba las ilustraciones en la biblia. Los niños escuchaban atentamente mientras imaginaban a David luchando contra leones y gigantes con su honda. Estaban fascinados por su historia.

Después, Jesús les preguntó:"¿Qué creen ustedes que hizo a David tan valiente?"Uno de los niños levantó la mano y respondió:"¡Creo que fue porque confiaba mucho en Dios!"Jesús sonrió y asintió con la cabeza:"Exactamente, mi amigo.

David sabía que Dios siempre estaría con él, así que nunca tuvo miedo". Los niños estaban emocionados por aprender más sobre valentía y fe. Querían ser como David algún día.

Jesús continuó leyendo otras historias inspiradoras de personas comunes haciendo cosas extraordinarias gracias a su confianza en Dios. Habló de Moisés, que lideró a su pueblo fuera de Egipto; de Esther, que salvó a su nación con valentía; y de Daniel, quien confió en Dios incluso cuando fue arrojado al foso de los leones.

Los niños estaban asombrados por todas estas historias y querían aprender más. Pero Jesús tenía una sorpresa preparada para ellos. "Ahora chicos, ¿qué tal si ustedes también hacen algo valiente hoy?" propuso Jesús.

Los niños se miraron entre sí emocionados. Querían mostrarle a Jesús lo valientes que podían ser. "¡Vamos a hacerlo!" exclamaron al unísono. Jesús les dio unas hojas en blanco y crayones para dibujar lo que consideraran un acto valiente.

Los niños se concentraron y comenzaron a dibujar con entusiasmo. Cuando terminaron, mostraron sus creaciones a Jesús. Algunos habían dibujado escenas de rescates heroicos, otros habían plasmado situaciones difíciles superadas con coraje.

Jesús observó cada dibujo detenidamente y luego dijo:"Estoy muy orgulloso de todos ustedes. Cada uno ha demostrado mucha valentía al enfrentar sus miedos imaginarios". Los niños sonrieron llenos de felicidad y se abrazaron mutuamente sintiéndose especiales por haber compartido ese momento con Jesús.

Esa tarde, cada niño llevó consigo su dibujo como recordatorio de lo valientes que eran capaces de ser. Y así, gracias a las historias inspiradoras y la compañía de Jesús, aprendieron que la valentía y la fe pueden ayudarles a superar cualquier obstáculo en su camino.

Y así termina nuestra historia, donde Jesús y los niños descubrieron juntos el poder de la valentía y la fe. Recuerda siempre creer en ti mismo y confiar en que puedes hacer cosas maravillosas.

No importa lo pequeño o joven que seas, ¡tienes el potencial para lograr grandes cosas!