Versos en el viento
Había una vez en un pequeño pueblo de Argentina, un niño llamado Trino. Trino vivía en una humilde casita junto a su mamá y sus tres hermanitos.
A pesar de las dificultades económicas que enfrentaban, la familia siempre se apoyaba y encontraba alegría en las pequeñas cosas de la vida. Desde muy temprana edad, Trino descubrió que tenía un don especial: era capaz de ver poesía en todo lo que le rodeaba.
Cada árbol, cada flor, cada nube en el cielo eran para él fuentes inagotables de inspiración. Su corazón se llenaba de versos y rimas que no podía evitar plasmar en papel.
Un día, mientras caminaba por el parque del pueblo, Trino vio a un grupo de niños jugando al fútbol. Se acercó tímidamente y les preguntó si podía jugar con ellos. "¡Claro! ¡Vení!", respondieron los chicos emocionados. Trino corrió tras la pelota con alegría desbordante.
Cada movimiento, cada jugada le inspiraban nuevos versos que fluían como ríos desde su mente hasta su boca. "El balón es redondo como el sol brillante, y al rodar por el césped canta melodías vibrantes.
Los pies bailan al compás del juego, mientras la risa se escapa como fuego. "Los niños quedaron maravillados con las palabras del pequeño poeta futbolista. Nunca antes habían escuchado algo así mientras jugaban al fútbol.
Desde ese día, Trino se convirtió en el poeta oficial del equipo, y cada partido se convertía en una obra de arte llena de versos y emociones. Poco a poco, la fama de Trino como poeta se extendió por todo el pueblo.
Las personas venían a escucharlo recitar sus poemas en la plaza principal y quedaban fascinadas con su talento. Incluso los adultos aprendieron a ver el mundo con ojos poéticos gracias a las palabras del pequeño Trino. Un día, llegó al pueblo un famoso escritor llamado Martín.
Había escuchado hablar sobre el increíble talento de Trino y decidió conocerlo en persona. Al encontrarse, Martín quedó impresionado por la sabiduría y sensibilidad que emanaba del niño. "Trino, tienes un don maravilloso", le dijo Martín.
"Tus palabras tienen el poder de tocar corazones y cambiar vidas. ""¿De verdad crees eso?", preguntó Trino emocionado. —"Absolutamente" , respondió Martín. "Y creo que debes compartir tu poesía con el mundo entero.
"A partir de ese momento, Trino comenzó a escribir libros llenos de poesías inspiradoras para niños y adultos por igual. Sus obras fueron publicadas en todo el país e incluso llegaron a cruzar fronteras. Trino nunca dejó que su origen humilde limitara sus sueños ni su pasión por la poesía.
Aprendió que los obstáculos son solo oportunidades para crecer y brillar aún más fuerte. Y así fue como un niño llamado Trino, nacido en pobreza y miseria, logró transmitir amor, esperanza y belleza al mundo entero mediante sus versos y poemas.
Su historia nos enseña que todos tenemos un don especial dentro de nosotros, solo debemos descubrirlo y compartirlo con el mundo. Fin.
FIN.