Wilmer y el Dragón Rescatado


Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Alegre, un niño curioso y valiente llamado Wilmer. Un día, mientras jugaba en el bosque cercano a su casa, se encontró con dos maestras que estaban de paseo.

"- ¡Hola! Soy Wilmer, ¿quieren ser mis maestras?", les preguntó emocionado. Las maestras se miraron sorprendidas, pero luego sonrieron y aceptaron la propuesta de Wilmer. Sin embargo, antes de comenzar con las clases, Wilmer les pidió que se presentaran.

"- Yo soy Eva", dijo la primera maestra con una gran sonrisa. "- Y yo soy María", agregó la segunda maestra con entusiasmo. Wilmer estaba encantado de tener a Eva y María como sus nuevas maestras.

Juntos emprendieron muchas aventuras educativas por el bosque y el pueblo. Un día, mientras exploraban una cueva misteriosa, escucharon un fuerte rugido proveniente del fondo. "¡Es un dragón rojo!", exclamó Wilmer asombrado.

Eva y María se miraron preocupadas, pero Wilmer les recordó que juntos podrían enfrentar cualquier desafío. Decidieron adentrarse en la cueva para investigar y ayudar al dragón si lo necesitaba. Al llegar al fondo de la cueva, encontraron al imponente dragón rojo atrapado entre unas rocas.

Estaba herido y necesitaba ayuda. Con valentía y trabajo en equipo, lograron liberarlo y curar sus heridas. El dragón agradecido les contó que había sido capturado por unos cazadores malvados que querían venderlo como atracción en un circo ambulante.

Wilmer, Eva y María decidieron ayudarlo a regresar a su hogar en las montañas lejanas donde vivía en paz.

Durante el viaje, el dragón compartió con ellos historias fascinantes sobre su mundo mágico y les enseñó lecciones valiosas sobre amistad, respeto por la naturaleza y trabajo en equipo. Finalmente, llegaron a las montañas donde el dragón fue recibido calurosamente por su familia y amigos.

Agradecidos por toda la ayuda brindada por Wilmer, Eva y María; el dragón les regaló tres piedras mágicas como símbolo de gratitud y amistad eterna. Wilmer aprendió muchas cosas nuevas durante esta increíble aventura junto a sus maestras.

Comprendió que con valentía, solidaridad y trabajo en equipo se pueden superar los desafíos más grandes e inesperados. Y así continuaron explorando juntos nuevos mundos llenos de enseñanzas e inspiración para seguir creciendo cada día más felices y unidos como verdaderos amigos.

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