Ziggy y sus modales galácticos


En un planeta lejano, en la galaxia de Zorblat, vivía un pequeño extraterrestre llamado Ziggy. Ziggy era muy curioso y siempre estaba explorando su entorno con gran entusiasmo.

Sin embargo, había algo en lo que Ziggy no era tan bueno: ¡los buenos modales en la mesa! Un día, Ziggy fue invitado a cenar al hogar de sus amigos alienígenas, los Glorpianos.

Estaba emocionado por probar la deliciosa comida que preparaban, pero cuando llegó el momento de sentarse a la mesa, comenzaron los problemas. Ziggy no usaba servilleta y se ensuciaba las manos y la cara mientras comía. "¡Ups! ¡Perdón!", decía cada vez que derramaba comida sobre la mesa. - Los Glorpianos intercambiaron miradas preocupadas.

Sabían que Ziggy necesitaba ayuda para aprender buenos modales en la mesa. Decidieron enseñarle a Ziggy cómo usar una servilleta correctamente y cómo sostener los cubiertos adecuadamente.

Al principio le costó un poco acostumbrarse, pero con práctica y paciencia, Ziggy empezó a mejorar. Durante otra cena con los Glorpianos, Ziggy mostró sus nuevos conocimientos de etiqueta. - Esta vez usó su servilleta sin problemas y manejó los cubiertos como todo un experto.

- Los Glorpianos estaban impresionados y felices de ver el progreso de su amigo extraterrestre. Pero justo cuando parecía que todo iba sobre ruedas,- ocurrió un incidente inesperado.

- Mientras hablaban animadamente durante la cena,- Ziggy escupió accidentalmente un pedacito de comida sobre el plato de uno de los Glorpianos. - Todos se quedaron en silencio por un momento. Ziggy se puso nervioso y se disculpó rápidamente: "Lo siento mucho, fue sin querer". Los Glorpianos sonrieron comprensivamente.

Sabían que todos cometemos errores y lo importante es aprender de ellos. Entonces,- uno de los Glorpianos dijo amablemente:"Ziggy,- todos cometemos errores a veces. Lo importante es ser consciente de nuestros actos y tratar siempre de mejorar.

"- Esa noche,- terminaron la cena entre risas y charlas animadas. Desde ese día,- Ziggy se esforzó aún más por demostrar buenos modales en la mesa. - Practicaba en casa frente al espejo e incluso inventaba divertidos juegos para recordar todas las reglas aprendidas.

Con el tiempo,- Ziggy se convirtió en todo un experto en etiqueta alimentaria. - Cuando volvieron a invitarlo a cenar con los Glorpianos,- quedaron sorprendidos por lo bien que se comportaba ahora su amigo extraterrestre.

- Estaban orgullosos del esfuerzo que había puesto en mejorar sus modales. Y así,- gracias a la paciencia y amistad de los Glorpianos,- Ziggy aprendió una valiosa lección: nunca es tarde para cambiar y mejorar.

+ A partir de ese día,- disfrutaron muchas cenas juntos llenas de alegría- donde no solo compartían exquisitos platillos sino también grandes momentos como verdaderos amigos del espacio exterior.

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