Zippy y la montaña de la amistad

En lo alto de una montaña, alejada del bullicio de la ciudad, vivían vacas, llamas, ovejas, cabras y zorros. La montaña no era muy alta, pero tenía un camino empinado que hacía difícil el acceso a los humanos.

Un día llegó un pequeño zorro llamado Zippy. Era curioso y aventurero y quería explorar cada rincón de la montaña.

Al principio los demás animales se mostraron desconfiados con él, pero poco a poco fue ganándose su confianza gracias a su amabilidad y buen humor. "¡Hola amigos! Soy Zippy ¿Qué están haciendo?"- preguntó con entusiasmo. "Estamos pastando"- respondió una vaca. "Yo estoy descansando"- dijo una oveja bostezando. Zippy se acercó a cada uno de ellos para conocerlos mejor.

Les preguntaba sobre sus vidas en la montaña y les contaba divertidas historias sobre sus aventuras en el bosque cercano.

Pero un día algo extraño sucedió: las nubes cubrieron el cielo por completo y comenzó a llover sin parar durante varios días seguidos. Los animales se refugiaron en sus cuevas para evitar mojarse demasiado. "No podemos seguir así" -dijo preocupada una cabra-. "La hierba se está arruinando con tanta agua".

Entonces todos comenzaron a buscar soluciones para resolver el problema del exceso de lluvia. Fue entonces cuando Zippy tuvo una idea brillante:"¡Podemos construir un canal para desviar el agua hacia otro lado!"- exclamó emocionado.

Todos estaban impresionados con la idea de Zippy y comenzaron a trabajar juntos para construir el canal. Las llamas y las vacas ayudaban a arrastrar las piedras grandes, mientras que las cabras y ovejas se encargaban de llevar ramas y hojas para tapar los agujeros.

Después de mucho trabajo, finalmente lograron construir el canal. La hierba volvió a crecer en su lugar habitual y todos estaban felices. "¡Gracias Zippy por habernos dado esta gran idea!"- exclamó una vaca emocionada.

Desde ese día, Zippy se convirtió en un héroe para los animales de la montaña. Todos lo admiraban por su valentía e inteligencia. Y así, gracias al esfuerzo conjunto y la creatividad de Zippy, lograron superar un obstáculo que parecía insuperable.

La montaña sin nieve se convirtió en un lugar más amigable gracias a la amistad entre estos animales tan distintos entre sí pero que lograron trabajar juntos para conseguir un objetivo común.