El Baile de la Tortuga

Érase una vez, en un día soleado, el señor Miguel decidió ir a comprar una tortuga a una tienda de mascotas. Al llegar, quedó maravillado con lo grande que era la tienda, tanto que casi se pierde entre los pasillos.

Mientras buscaba la sección de tortugas, una señora muy bonita se acercó a él y lo invitó a un baile que se celebraría esa misma noche.

El señor Miguel, emocionado, decidió ir al baile, pero antes quiso llevarle un regalo a la señora. Así que se dirigió a buscar las flores más bonitas que pudiera encontrar. Al llegar al baile, la señora quedó encantada con las flores y, entre risas y bailes, descubrieron que tenían muchos intereses en común.

El tiempo pasó volando y, antes de darse cuenta, el señor Miguel y la señora bonita se encontraban caminando juntos por un hermoso pasillo.

Todo el mundo los miraba con alegría, y en ese momento, el señor Miguel le preguntó a la señora si quería casarse con él. La señora, con lágrimas de felicidad en los ojos, dijo que sí. Y así, con una tortuga como testigo, el señor Miguel y la señora bonita se casaron, viviendo felices para siempre.