El burro del campesino y la leña del cerro
En un pequeño pueblo, vivía un campesino llamado Juan, quien tenía un burro muy travieso llamado Pancho. Pancho vivía al lado del río, donde había un cerro lleno de árboles y leña.
Todos los días, Juan tenía que subir al cerro para buscar leña para cocinar y mantener su hogar cálido. Sin embargo, Pancho siempre se ponía nervioso cuando veía el cerro y se negaba a subir. "Pancho, hoy tenemos que ir a buscar leña al cerro", le decía Juan.
Pero Pancho solo movía la cabeza en señal de negación. Juan intentó de muchas maneras convencer a Pancho de subir al cerro, pero el burro siempre se resistía. Un día, Juan tuvo una gran idea.
Decidió llevar a Pancho al cerro y enseñarle que no había nada de qué temer. Con paciencia, Juan subió con Pancho y juntos recogieron leña. Al principio, Pancho estaba asustado, pero con el tiempo, empezó a sentirse más cómodo.
Finalmente, regresaron a casa con toda la leña. Desde ese día, Pancho ya no le temía al cerro y ayudaba a Juan a recoger leña sin problemas.
Juan aprendió que con un poco de paciencia y comprensión, incluso el animal más asustadizo puede superar sus miedos y ayudar. Y Pancho aprendió que, a veces, las cosas que parecen aterradoras al principio, pueden resultar maravillosas si nos atrevemos a enfrentarlas.
FIN.