El Conejo Hermoso y el Ratón Perdido
En un hermoso bosque vivía un conejo travieso y juguetón. Un día, decidió aventurarse más allá de los límites del bosque y se encontró con un ratoncito que estaba buscando comida. El conejo, emocionado, le propuso al ratón jugar juntos. Los dos amigos se divirtieron tanto que no se dieron cuenta de que habían llegado a la orilla del mar. De repente, una ola gigante los arrastró mar adentro y se encontraron perdidos en medio del océano.
El conejo y el ratón, asustados, no sabían qué hacer. De repente, un destello de luz iluminó el agua y apareció el hada madrina. Con su varita mágica, transformó el agua en un camino de cristal que llevaba de vuelta a la orilla. Con su ayuda, el conejo y el ratón lograron regresar sanos y salvos a la orilla del bosque.
Desde ese día, el conejo y el ratón aprendieron que la amistad y la confianza son fundamentales en la vida. También descubrieron que, incluso en los momentos más difíciles, siempre hay alguien dispuesto a ayudar. El hada madrina les enseñó que la magia más poderosa de todas es la bondad y el cuidado hacia los demás.
El conejo y el ratón, agradecidos, prometieron siempre ayudar a aquellos que lo necesitaran, manteniendo viva la lección que el hada les había enseñado. Y así, con valentía y generosidad, siguieron viviendo aventuras y contando historias de sus viajes por el bosque, siendo ejemplos de amistad y solidaridad para todos los animales que habitaban en él.
FIN.