El elefante Eustaquio



Había una vez en la selva un elefante llamado Eustaquio. Eustaquio era un elefante muy curioso, siempre estaba explorando la selva en busca de nuevas aventuras.

Un día, mientras caminaba por la selva, Eustaquio se encontró con una elefanta llamada Estela. -¡Hola, Estela! ¿Cómo estás? -saludó Eustaquio. -Hola, Eustaquio. Estoy bien, ¿y tú? -respondió Estela. -Estoy buscando algo emocionante para hacer. ¿Quieres unirte a mí? -propuso Eustaquio. -¡Claro! Me encantaría. ¿Qué tienes en mente? -dijo Estela.

Eustaquio pensó por un momento y luego dijo: -He escuchado sobre una montaña mágica en la selva que guarda un tesoro increíble. ¿Te gustaría venir conmigo a buscarlo? -¡Sí, por supuesto! -respondió emocionada Estela.

Juntos, Eustaquio y Estela se embarcaron en una emocionante aventura hacia la montaña mágica. Durante el camino, encontraron varios obstáculos, pero con valentía y trabajo en equipo lograron superarlos. Finalmente, llegaron a la cima de la montaña y descubrieron el tesoro: no era oro ni joyas, sino conocimiento y sabiduría.

Eustaquio y Estela se dieron cuenta de que la verdadera riqueza está en el aprendizaje y la amistad. Con el tesoro en sus corazones, regresaron a la selva compartiendo sus conocimientos con los demás animales.

Desde ese día, Eustaquio y Estela se convirtieron en los exploradores más queridos de la selva, enseñando a todos la importancia de la curiosidad y el compañerismo.

FIN.

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