El niño que no podía dejar de usar pañal
Había una vez un niño llamado Lucas, que tenía cinco años y todavía no quería dejar de usar pañal.
A pesar de todos los intentos de su mamá y papá por animarlo a usar el baño como los niños grandes, Lucas se resistía y se aferraba a su pañal como si fuera su mejor amigo.
Un día, Lucas se despertó con una gran determinación.
Miró el calendario y decidió que ese día sería el día en que finalmente dejaría de usar pañal. Se levantó, se puso su pantalón de superhéroe y miró a su mamá con una sonrisa confiada. -Mamá, hoy es el día. Voy a usar el baño como un niño grande, ¡lo prometo! - le dijo con entusiasmo.
Su mamá lo abrazó emocionada y lo llevó al baño, donde le explicó cómo hacerlo. Lucas se sentó en el inodoro con determinación, pero algo en su interior lo hacía sentir incómodo.
De repente, escuchó un ruido y vio salir a un pequeño ratón del desagüe del baño. -¡Hola Lucas! ¿Cómo estás? -dijo el ratón. Lucas se sorprendió tanto que se olvidó por completo de lo incómodo que se sentía. -¿Quién eres tú? -preguntó. -Soy Ratatín, el ratón del baño.
He estado observando que quieres dejar de usar pañal, pero sientes miedo. Lucas asintió con timidez. Ratatín le explicó que era normal sentir miedo de los cambios, pero que él podía ayudarlo a vencerlo.
Juntos, crearon un plan para que Lucas se sintiera cómodo usando el baño, como decorar el baño con sus personajes favoritos, usar una luz de noche y cantar una canción divertida mientras se sentaba en el inodoro.
Al cabo de unas semanas, Lucas logró dejar de usar pañal gracias a la valiosa ayuda de Ratatín. Estaba tan orgulloso de sí mismo que le contó a todos sus amigos en el jardín de infantes sobre su aventura con Ratatín y cómo había vencido su miedo.
Desde ese día, Lucas y Ratatín se convirtieron en grandes amigos y siempre disfrutaban de divertidas aventuras juntos.
FIN.