Emilia y su primera bicicleta
Emilia vivía en un barrio tranquilo donde todos los niños andaban en bicicleta. Sin embargo, ella todavía no sabía cómo hacerlo. Todos los días observaba a sus amigos pedalear con alegría y libertad, mientras ella se quedaba atrás.
Un día, su abuelo le regaló una bicicleta brillante y le dijo: "Es hora de que aprendas a andar en bicicleta, Emilia". Emilia estaba emocionada, pero también tenía miedo de caerse. "No sé si puedo abuelo, tengo miedo de caerme".
"No te preocupes, Emilia. Te enseñaré paso a paso y te sostendré para que no te lastimes", dijo su abuelo con una sonrisa reconfortante. Empezaron con las rueditas de apoyo y su abuelo la guiaba con paciencia mientras ella practicaba pedalear.
Pasaron los días y Emilia seguía intentándolo una y otra vez, pero cada vez que perdía el equilibrio, su abuelo estaba ahí para sostenerla. Un día, Emilia decidió intentarlo sola. Respiró hondo, se impulsó con fuerza y comenzó a pedalear.
Por un momento pareció que iba a caer, pero de repente, encontró su equilibrio y siguió adelante. Emilia estaba radiante de felicidad.
Desde ese día, Emilia andaba en bicicleta por todo el barrio, disfrutando de la libertad y la emoción de la velocidad. Aprendió que con esfuerzo y perseverancia, se pueden superar los miedos y alcanzar los sueños.
FIN.