Lola y la Lista de Compras
Lola era una niña muy traviesa y distraída que estaba en primer grado de la escuela. No le gustaba prestar atención en clase ni aprender cosas nuevas. Siempre prefería jugar y contar chistes con sus amigos.
Un día, su mamá le pidió que fuera al mercado a comprar algunas cosas, y le entregó una lista con los productos que necesitaba.
Lola tomó la lista y se fue al negocio, pero al llegar, se dio cuenta de que no podía leer lo que decía en papel. Se sintió muy frustrada y preocupada, sin saber qué hacer. Fue entonces cuando conoció a Don Quique, el amable dueño de la tienda. -Hola, pequeña. ¿Puedo ayudarte en algo? -preguntó Don Quique con una sonrisa.
-Hola, Don Quique. Estoy aquí para comprar, pero no sé leer lo que dice en esta lista. -respondió Lola avergonzada. Don Quique tomó la lista y la leyó en voz alta.
Mientras recorrían los pasillos del negocio, Don Quique le iba mostrando a Lola los productos que necesitaba. Mientras tanto, le contaba historias fascinantes sobre cada uno de ellos, como el origen de las frutas y verduras, o la importancia de los productos de limpieza.
Lola escuchaba con atención, maravillada por todo lo que estaba aprendiendo. Al final, lograron reunir todos los productos de la lista. Don Quique le entregó a Lola una pequeña libreta y un lápiz. -Toma, Lola. Esta libreta puede ser tu amiga.
Aquí puedes escribir todo lo que necesitas recordar en la tienda y practicarás para leer y escribir. Lola agradeció a Don Quique por su ayuda y se fue a casa, ansiosa por practicar su lectura y escritura.
Desde ese día, Lola tomó en serio su educación. Se esforzó por aprender a leer y escribir, y cada vez que iba al negocio, usaba su libreta para repasar y recordar los productos que necesitaba.
Con el tiempo, se volvió una excelente lectora y escritora, y disfrutaba mucho ayudando a su mamá en las compras. Todo gracias a la amabilidad y enseñanzas de Don Quique, quien le mostró a Lola que aprender puede ser divertido y útil.
FIN.