Paco Yunque y el valor de la amistad

Paco Yunque era un niño muy amable, siempre atento a ayudar a sus compañeros en la escuela. Sin embargo, Humberto Griebe, un chico más grande y fuerte, solía molestar a Paco y a otros niños.

Un día, a la hora de recreo, Humberto le pegó a Paco Yunque sin motivo alguno. Paco se levantó, limpió sus lágrimas y decidió buscar una solución. - '¿Por qué me pegaste, Humberto? No te he hecho nada', le dijo Paco con valentía.

- 'No te importa, soy más fuerte que tú', respondió Humberto con prepotencia. Paco, con determinación, decidió hablar con la maestra y contarle lo sucedido.

La maestra escuchó a Paco con atención, le dio un abrazo y le dijo que pondría fin a esa situación. Al día siguiente, la maestra habló con Humberto y le explicó que lastimar a sus compañeros no era aceptable. Humberto comprendió su error y se disculpó con Paco y todos los niños a quienes había dañado.

Desde ese día, Humberto y Paco se hicieron amigos, aprendieron a respetarse mutuamente y a trabajar juntos para evitar cualquier tipo de violencia en la escuela.

La valentía de Paco Yunque enseñó a todos que siempre hay una forma pacífica de resolver los conflictos, y que la amistad es más poderosa que cualquier problema.