Super Tía Belén y los valientes primos



Victoria y Luciano eran dos niños muy diferentes entre sí. Mientras que Victoria era una niña valiente y aventurera, a Luciano le daba miedo probar cosas nuevas.

Un día, LA SUPER tia belen decidió llevarlos a un parque de diversiones para pasar el día juntos. Al principio, Victoria estaba emocionada por probar todas las atracciones del parque, pero Luciano se aferraba a la mano de su tía con miedo en sus ojos.

"No quiero subir al carrusel, tía Belén", dijo Luciano tembloroso. "No te preocupes, Luciano", respondió su tía. "No tienes que hacer nada que no quieras hacer.

Pero ¿por qué no intentamos algo más tranquilo primero?"Así fue como empezaron por los juegos más sencillos: el tren fantasma y los autos chocadores. A medida que avanzaban en el parque, La Super Tía Belén notó cómo la confianza de Victoria iba creciendo mientras que la de Luciano seguía siendo baja.

"¡Vamos a subir al barco pirata!", gritó Victoria emocionada. "Yo no quiero ir", dijo Luciano asustado. La Super Tía Belén pensó rápidamente en una solución para ayudar a su sobrino a superar sus miedos.

"¿Qué tal si hacemos un trato?", propuso ella. "Si tú te animas a subir al barco pirata conmigo ahora mismo, después yo me comprometo a hacer algo que me dé miedo también". Luciano pensó en ello por un momento antes de aceptar el trato con entusiasmo.

De repente, La Super Tía Belén y Luciano se encontraron en el barco pirata, subiendo cada vez más alto. Luciano estaba asustado al principio, pero luego empezó a disfrutar de la emoción de la atracción.

"¡Esto es genial!", gritó Victoria emocionada. Cuando terminaron su día en el parque de diversiones, La Super Tía Belén cumplió su promesa y les mostró a sus sobrinos cómo también ella tenía miedos que debía superar.

Les enseñó que todos tenemos miedos, pero lo importante es no dejar que nos detengan. A partir de ese día, Luciano se sintió más seguro para probar cosas nuevas y Victoria aprendió a ser paciente y comprensiva con los demás.

Juntos, aprendieron una valiosa lección sobre la importancia de enfrentar nuestros miedos y apoyarnos mutuamente en el camino hacia la superación personal.

FIN.

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